Peor imposible

El partido de Estudiantes fue una vergüenza, realmente no hay otra palabra que lo describa mejor. Imposible imaginar un final de año peor a este. Con la chance de redondear una buena campaña, la mejor desde la salida de Sabella, se termina por dejar una imagen muy floja.
Estudiantes sacó solo 27 puntos en el peor torneo corto de la historia. Y si sacó 27 puntos, viendo su rendimiento (sobre todo de local) es porque hubo equipos demasiado malos. Tenemos 27 puntos por Colón, por Quilmes, por Racing, por All Boys. Todas victorias de local sin dejar una buena imagen (salvo el PT con All Boys) y es más, haciendo pésimos partidos como con Racing o Colón.
Nos conformábamos con el "no somos menos que nadie". Eso, que es cierto, no es una virtud. Fue un torneo extremadamente mediocre, eso no puede justificar las falencias propias.

El objetivo de 28 puntos no se cumplió. Y tampoco se cumplió lo buscado por el DT. Si desde esquema y discurso buscaba un equipo ofensivo, jamás se vio. Porque los mejores partidos de Estudiantes fueron cuando fue de punto frente a un rival fuerte, a esperarlo, presionarlo y salirle de contra (Lanús, Newell's, San Lorenzo). En cambio, ante rivales muy débiles hubo partidos lamentables (Rafaela, Argentinos, Godoy Cruz, Tigre hoy, todos partidos de 6 puntos). A esto se le puede sumar el clásico, muy cerca de lo que pudo haber sido una derrota histórica, dando una imagen muy triste frente a un rival que metía y mordía.

Lo de hoy, fue más de lo mismo. Pero peor. El nivel de imprecisión fue alarmante. Finalmente, te meten un gol por la estúpida obsesión del DT por salir jugando. Después nada de nada, apenas un par de tiros al arco, apenas. Apatía generalizada, rendimientos bajísimos incluso de jugadores como Gil Romero que casi siempre cumple.

Para colmo, una triste imagen de Verón en lo que pudo haber sido su último partido. Más allá de su floja actuación (como la de todos) haciéndose expulsar vaya uno a saber por qué. Pura impotencia, echándole la culpa al árbitro por la patética imagen de su equipo.
Eso sí, Verón demuestra que jugar así le molesta. Lo mostró con Colón pese a la victoria, hoy por calentón lo mostró en la cancha. En cambio, parece que otros (incluso algunos pibes) hoy salieron a la cancha pensando en las vacaciones.

Mientras la gente parece excesivamente generosa con los aplausos, finalizando el tercer año mediocre seguido.

Deberá trabajar mucho el DT, tener autocrítica (para ser suaves, por lo de hoy debería pedirle perdón a la gente) y darse cuenta que el camino a seguir es el de Rosario, el de Lanús, el del Nuevo Gasómetro. No estos partidos de local pese a un invicto hasta hoy solo logrado por haber enfrentado a rivales de muy bajo nivel.

La especialidad de la casa

Bidón, inteligencia, sacrificio. Estudiantes jugó como manda su historia.

Es un equipo extremadamente irregular, pero que antes los rivales difíciles siempre estuvo a la altura. Hoy no arrancó muy bien (como todos los partidos de visitantes) pero se fue acomodando, poniendo nervioso a San Lorenzo y empezó a manejar un poco más el partido. El segundo tiempo fue excelente, a esperar atrás y salir bien rápido, algo que no había salido bien en el primer tiempo salvo en la jugada del final que pegó en el travesaño. Después se sufrió, y cuando se falló en defensa respondió bien Rulli.

El periodismo nos ninguneó, los jugadores cuervos nos ningunearon, los hinchas festejaban antes de tiempo. Para ser campeón, hay que tener huevos, aunque en este torneo de locos nadie parece tenerlos. Hoy la hinchada del Cuervo cuando más tenía que empujar, en silencio.
Salvo para cantar "equipo chico la puta que te parió" cuando Rulli hacía tiempo, mientras todos nosotros sonreíamos. Chicos, con orgullo, pero con cuatro Copas que en tu puta vida vas a ganar.

A ganarle a Tigre y llegar a los tan ansiados 30 puntos.


- Rulli, hacer tiempo es de equipo chico, de equipo grande, de equipo vivo?
- Es Estudiantes... Estudiantes es una escuela.

Con lo mínimo

Estudiantes 1 - 0 Colón

Lo mismo de siempre

Cuestión repetida en Estudiantes en estos dos años, cada vez que esboza una mejoría en el rendimiento o logra buenos resultados que hacen pensar que se puede, por fin, dar un salto de calidad y confirmar la levantada, Estudiantes retrocede varios casilleros en su rendimiento y pierde ante equipos mediocres. Ya que aún jugando mal, casi nunca es menos que su rival.
Salieron a la cancha dormidos, cuidando las patas, dándole la pelota a Godoy Cruz y llenos de imprecisiones (a Rulli le hicieron 4 pases en los primeros 2 minutos, en dos se complicó). Otro penal infantil, el tercero por mano en este torneo, y 0-1 y a remarla por tercer partido consecutivo. Como con River, luego de un arranque pésimo tras estar en desventaja el rendimiento levantó un poco, ayudado por el planteo rival de esperar más atrás. Sin mucha claridad, tuvo un par de chances para lograr el empate.
En el segundo tiempo fue más decidido y resultó clave el ingreso de Luna, que entró dormido y displicente, pero fue determinante en la pelota parada. Tres corners muy bien ejecutados hasta que finalmente tras una carambola Vergini la mandó a guardar.
El DT no podía rearmar el planteo inicial ya que otra vez arma mal el banco (3 defensores, 2 volantes ofensivos, un delantero), aunque es cierto que no tiene mucho más para poner. Con un equipo volcado al ataque y tras un corner a favor, una salida rápida del arquero agarra a Estudiantes mal parado, que sin embargo retrocede bien marcando los pases y obliga al lateral izquierdo del Tomba a patear de lejos. Si Rulli fue clave en ganar un punto la semana pasada, hoy nos lo hace perder. La respuesta es flojísima, cerrando un flojísimo partido del arquero en el que, salvo en los goles, no le patearon al arco. Pero promediando el primer tiempo salió muy mal en un corner y de milagro no fue gol de Godoy Cruz. Ya está cerca de los 30 partidos en Primera, pero sigue lejos de dar seguridad, particularmente en los centros, en el juego con los pies y los remates de media distancia.

Un punto perdido, otra vez cerca del final, y ante un rival de la zona baja. Que Correa ni concentre mientras Auzqui es titular y Mariano González va al banco es cada día más inentendible.

La próxima frente a un Colón en caída libre, que igualmente siempre nos complica (debe ser el único equipo regular de Primera al que Estudiantes no le pudo ganar de local en estos 7-8 años). Serán clave los dos partidos de local para llegar a 29 puntos, en el medio un viaje de riesgo al Gasómetro, aunque a este equipo jugar contra rivales fuertes lo beneficia.

Estudiantes 1 - 1 Central

Nota en Animals!

PUSO TODO, SE LLEVÓ ALGO

Estudiantes empató 1 a 1 con Central en un partido que nuevamente debió remontar. La reacción, la presión, el espíritu y las situaciones de riesgo creadas marcaban que el resultado debía ser una victoria del equipo de Pellegrino, pero también estuvo cerca de perderlo y, al menos, se quedó con un punto. Y con una buena imagen.
Los imponderables marcaron la mala suerte del Pincha, pues en el primer tiempo se lesionaron Franco Jara y Sebastián Verón; y al comenzar el segundo, cuando el equipo dominaba campo, pelota y juego, un centro mal tirado de Ferrari se coló en el ángulo de Rulli. Pero pese a todos esos condicionantes, y al mazazo de la carambola, el equipo reaccionó con fútbol y temple. Generó varias situaciones, convirtió a Caranta en figura y al fin consiguió la igualdad tras un cabezazo de Auzqui que Donatti mandó en contra de su arco en un intento de despeje.
Pellegrino sabía que el punto era un premio exiguo e incongruente con las aspiraciones de meterse en la pelea por el título. Por eso pese a las contingencias procuró la victoria. Con algo de desorden, mucho de espíritu, muy buenas figuras como Patito Rodríguez (enorme, lujoso, a veces solo) y Desábato, y también con riesgo. En ese último cuarto de hora Estudiantes asumió que debía atacar y sufrir, pues Central nunca resignó el ataque al punto de que Rulli debió intervenir y salvar el resultado.

Al final fue empate. Quedó el sabor amargo por los dos puntos perdidos, pero con la conciencia tranquila de haber quemado las naves por un objetivo. 

Tres puntos de oro

Nota publicada en Animals!:

Estudiantes ganó por primera vez dos partidos en forma consecutiva, y nada menos que ante River en Núñez, con lo que se configuró su primer triunfo en calidad de visitante en este campeonato. Ah, y fue la primera también en poder dar vuelta un resultado, porque comenzó perdiendo 1 a 0 con un gol de Menseguez, y en esa misma etapa lo empató Román Martínez y el segundo fue una gran jugada colectiva que terminó con un pase a la red de Carlos Auzqui.
La noche no había comenzado de la mejor manera. Pellegrino decidió cambiar el libreto de siempre y, al principio, a los intérpretes les costó descifrarlo. Al punto de que River fue protagonista exclusivo de ese primer cuarto de hora. Y el Millo con justicia se puso 1 a 0 por una buena jugada en una baldosa del Rayo. Pero a partir de ese entonces fue todo del Pincha. Y pudo reaccionar con rapidez; fue profundo, incisivo en un ataque, Franco Jara envió un centro desde la izquierda que cabeceó Román, atajó Barovero con rebote, no pudo Patito pero fue el mismo Martínez el que la mandó adentro.
Un instante después River sufrió un golpe decisivo, que le quitaría manejo y recuperación en el medio: la expulsión de Ledesma. Y desde esa acción (patada a Román) hasta el final del segundo tiempo se vio lo mejor de Estudiantes. Buena presión, atildado manejo, rotación, desborde… Encima Pellegrino convirtió una mala noticia en una buena: se lesionó Leo Jara pero ingresó Rosales, que atacó con decisión y precisión. El gol de Auzqui decoró todo lo anterior.
Estudiantes podría haber optado por procurar la misma intensidad y posición en el campo que en esa última media hora. Pero prefirió achicar espacios hacia atrás y cederle la pelota al rival para aprovechar la rapidez de los medios y delanteros propios y, claro, no sufrir esas mismas características que tenían los de River.
En rigor, si los hinchas sufrieron en ese segundo tiempo fue por portación de antecedentes, por haberse empatado partidos solo (Belgrano, Olimpo). A River no se le cayó una idea, no generó situaciones. Y el Pincha no lo liquidó básicamente por dos razones: falta de precisión en ataque y exceso de egoísmo de los delanteros, primero de Jara y luego de Carrillo; ambos tenían pase y decidieron por la personal.
En esa segunda etapa quedó la sensación de que la victoria podía ser más holgada. Esta vez no padeció ningún imponderable. Y así festeja su segunda victoria consecutiva, su racha con los grandes (les ganó a los tres que enfrentó) y una posición más decorosa en la tabla.

Tres puntos son tres puntos

De local ante un rival directo. Había que ganar sí o sí y se ganó, eso es lo que importa.

Después podemos comentar lo mismo que en los últimos partidos en cuanto a las falencias de juego, pero en estos momentos de vacas flacas hay que saber disfrutar los triunfos por más flojo que sea el rendimiento.

Actitud hubo, después del patético partido en La Paternal, juego hubo poco y de a ratos. En el primer tiempo Estudiantes superó a su rival sin ser la gran cosa y casi se va perdiendo si Caneo metía el penal. El segundo fue flojo, con un Quilmes que lo superaba. Pero tras una buena jugada colectiva el Patito (a esta altura sin dudas el mejor de los volantes ofensivos) metió un golazo. Como era de esperar, Estudiantes no cerró el partido y se fue metiendo cada vez más atrás estando lejos de dar solidez en la defensa. Por suerte Quilmes no estuvo fino en la definición.

Buen primer tiempo de la Bruja, prolijo en el juego y muy bien en la pelota parada (aunque no acompañado por quienes estaban en el área), en el segundo se lo notaba agotado y demoró innecesariamente su salida. Pese al penal, buen partido de Gil Romero, y obviamente también fue bueno lo del Patito.
La titularidad de Auzqui es cada día más inexplicable (esto acentuado al ver que Correa no va ni al banco), si la explicación es porque marca hoy eso no se vio, constantemente aparecían hombres solo por su lado. Sin errores que costaran caro Rulli estuvo lejos de dar seguridad y se lo vio particularmente flojo con el pie y demasiado apurado a la hora de sacar rápido. Otra vez Jara cumplió de 4, mientras que el otro Jara con cierta torpeza obligó mucho y fue peligroso cuando desbordó, además de asistir a Rodríguez en el gol.

Partido, como contra Racing, de ganar como sea. Con Racing daba la sensación de que hacía falta un triunfo así para poder mejorar el juego, lejos de eso con Argentinos se vio lo peor del torneo. Ahora una parada brava en el Monumental, aunque a este equipo le conviene jugar contra un equipo que va a tener que salir a atacarlo.

Con la levantada de Central más los buenos torneos de Godoy Cruz y Rafaela la situación no es tranquila. Por eso la necesidad de este triunfo para descontarle más a All Boys, Argentinos y Tigre, más Quilmes que divide distinto, y poder alcanzar a Colón.

Apatía que no da para más

Si alguno había pensado que el necesario triunfo frente a Racing pese a mostrar poco podía significar una levantada en cuanto a resultados y rendimiento hoy esa idea quedó descartada.

Lamentable partido de Estudiantes. Quizás peor incluso que aquella otra derrota contra Rafaela. Un equipo apático como su técnico, que no muestra ideas, no muestra una evolución, no muestra nada más que la tendencia a tocar cansinamente la pelota sin lastimar al rival.

Muy atrás quedó aquel partido en Rosario, donde el empate se festejaba y donde el nivel del equipo ilusionaba. Era un equipo metido, concentrado, con garra. Muchos pensamos que después de eso se podía dar un salto de calidad, lejos de eso van 7 fechas con igual cantidad de puntos, un rendimiento en caída libre y una idea de juego que además de no llevarse a cabo eficazmente no es "la nuestra".

Poco para analizar lo de hoy. Un primer tiempo espantoso de los dos lados abierto por un golazo de Villalva. Lo mejor de Estudiantes fue la primer mitad del segundo tiempo, donde generó algunas situaciones y parecía acorralar al rival. Promediando el complemento dejó de ser una amenaza, los cambios no funcionaron y nunca volvió a dar la impresión de estar cerca del empate.

Flojísimo partido de Damonte que falló en el gol y en varias más. Martínez había arrancado bien y desapareció del mapa, algo imperdonable cuando el nuevo esquema está pensado para darle mayor libertad en la conducción del equipo. Luna exageradamente individualista tuvo algunas jugadas buenas donde llevó peligro, mientras que a F. Jara cuesta encontrarle una buena.

El lunes 28 ante el flojo Quilmes, es ganar o ganar y dejarse de joder. Hoy Argentinos, el peor promedio, nos ganó un partido de 6 puntos y nos dejó a 11 del descenso. Da la impresión que ni jugadores ni DT son conscientes de esto.

Vuelven el lunes a entrenar.

16 de octubre del 68'

Vale seis puntos

Triunfo clave de Estudiantes para cortar la racha sin victorias, alcanzar a Racing y evitar ser superado por Rafaela en los promedios.

Teniendo en cuenta que se jugó ante el peor equipo del torneo, Estudiantes mostró más de lo mismo, de sus virtudes y sus defectos. Fue superior a su rival, generó chances sin poder aprovecharlas y mostró serias fragilidades defensivas. No hay que hacer un análisis muy importante para darse cuenta que con este 4-3-3 y sin compromiso de los 3 de arriba en la marca, a los laterales se les va a hacer muy complicado cuando les hacen el dos-uno.

Consiguió la diferencia con un gol en contra (qué mierda importa) tras una buena jugada, y después se replegó más pero sin sufrir tanto pese a la preocupación obvia por sufrir otro gol sobre la hora. Triunfo importantísimo para levantar, para llegar a 16 puntos y para seguir trabajando. Porque falta muchísimo. Estudiantes no es menos que ningún equipo, pero apenas ganó 3 partidos de 11.
Hay cuestiones defensivas que preocupan, hay un ninguneo de la pelota parada indignante (hoy pateó un corner ¡Auzqui! solamente porque estaba cerca) y se mantiene la tendencia al "fulbito", a tocar entre los centrales y los volantes sin lograr profundidad y conexión con los jugadores ofensivos. Teniendo a un tanque como Carrillo cuya mejor virtud es peinarla o aguantarla de espalda, parece desaprovechada el arma del pelotazo, que es evidente que al DT no le gusta.

Gran partido del Chavo que mantiene un buen nivel, Jara cumplió de 4, y buen partido de Carrillo peleando todas (aunque le falta peso en el área).

Ahora a La Paternal, cancha siempre esquiva, pero frente a un rival que viene capa caída.

Puntito a puntito, te vas al descenso

Momento muy preocupante el de Estudiantes. Cinco puntos en seis partidos, cinco empates que no suman nada.

Sería fácil echarle la culpa a la mala suerte... "tampoco ligamos nada". Pero si te empatan sobre la hora en un gol de pelota parada, no es mala suerte. Es que falta trabajo, falta concentración.

Así como tampoco es mala suerte que teniendo 10 corners, en ninguno se lleve peligro al área rival.

El primer tiempo fue un espanto. Estudiantes salió a jugar a otra cosa, renunció al "fulbito", a lateralizar la pelota sin profundidad por algo más pragmático, acorde a la cancha y al rival. No concretó nada, apenas una llegada y varios desajustes defensivos donde Olimpo tuvo dos o tres claras.

En el segundo cambió, se paró más adelante y ocupó mejor los espacios. Gran pelotazo de Vergini bajado por el Patito, pase a Silva que entra al área y con un muy buen centro encuentra a Auzqui que cabecea cruzado.

Olimpo estaba muerto. Con su gente insultando, los jugadores nerviosos cometiendo muchos errores. Daba la impresión que si Estudiantes era preciso en dos pases lo liquidaba. Pero fue tibio, no buscó liquidarlo bajo la conducción de un Román Martínez (de lo mejor) que tuvo muchísimos espacios (desligado de la marca ante la presencia de Gil Romero y Damonte) y fue importante en la generación de juego aunque a veces estuvo impreciso en pases que podrían haber sido claves.

Así, llegaron los minutos finales y en un tiro libre donde no se sabe qué cobra Maglio, la peinan y por atrás ¡Sarulyte! convierte el empate mientras Martínez primero, los defensores y Damonte después observaban, al igual que Rulli.

Se lo empata solo Estudiantes, ante un Olimpo que no hacía nada.

Y no es mala suerte, aunque tengamos que escuchar seguramente al DT y al capitán declarar que se jugó bien y que se está mejorando, porque claro, es un equipo en formación.

Mientras tanto, 13 puntos en 10 fechas. A 12 puntos (4 partidos) de los puestos de descenso.

Se perdieron dos puntos con el anteúltimo, si no se ganan 3 contra el último de la tabla en la próxima semana la situación pasará a ser alarmante.

Deportivo Empate

Otro empate de Estudiantes, otro puntito de local (3 seguidos en esa condición) y 4 puntos de los últimos 15.
Frente a un duro rival alternó buenas y malas, fue un partido parejo y en el caso de no venir con esta racha negativa al empate se lo miraría con otros ojos. No ligó en ofensiva, pero también Vélez pudo haber marcado en varias que tuvo. Destacable partido de Rulli, importante para ganar confianza, y también lo de Gil Romero quien nunca desentona y con bastante frecuencia es de lo mejor del equipo.
Martínez tuvo su mejor partido en mucho tiempo (con poco le alcanzó para esto) y fue clave particularmente en su llegada sorpresiva al área sin marca. La más clara de Estudiantes estuvo en su cabeza y se la negó el travesaño. Lo más flojo se vio en Jara, a quien se lo notó perdido muchas veces en la cancha, y por enésima vez en Auzqui, cuya titularidad es inexplicable (aunque hoy mirando el banco es cierto que, con Correa disminuido físicamente, no había tanta alternativa).

Hay que salir de esta racha. Los empates no sirven, y hoy pese a haber perdido sólo un partido de nueve el campeonato de Estudiantes es de regular a malo, teniendo en cuenta el objetivo de unos 30 puntos para respirar tranquilos con el promedio.
El próximo, en Bahía ante uno de los peores equipos del torneo. Por características del rival y de la cancha, quizás sea similar al partido en Rafaela. El DT deberá trabajar para no volver a cometer los mismos errores que aquella vez.

Así no Estudiantes

Estudiantes no perdió el clásico porque Gimnasia es Gimnasia.
No perdió porque a Gimnasia y Esgrima la vida lo cagó.
No perdió porque a veces con la camiseta alcanza, pese a jugar muy mal.

Hubiese sido una derrota histórica y totalmente justa, ya que en la cancha hubo un equipo limitado en nombres, pero inteligente y muy metedor, y otro con aires de superioridad que intenta un juego que no le sale y defiende muy mal.

Otro mal planteo de Pellegrino, que expone demasiado las cartas y pretende una forma de jugar muy fácil de contrarrestar para equipos más limitados pero prácticos e inteligentes. Los mejores partidos de Estudiantes se podrán ver ante Lanús, ante Newell's, incluso ante Boca, equipos que buscan más. Pero con los Rafaela, los Gimnasia, los Belgrano, quedará pagando y se verán todas sus limitaciones. Porque el DT no cambia, porque el DT sobreestima a sus jugadores y a él mismo, mientras parece subestimar a los rivales.

Tiene un esquema en mente que nada se lo saca de la cabeza, aunque en su triple enganche normalmente apenas uno suele jugar bien, mientras que por las bandas a Estudiantes le llegan con demasiada facilidad. Flojo atrás, particularmente de pelota parada donde casi lo pierde en el final; flojo en el medio donde se vio superado en número y cuando tuvo la pelota fue impreciso; y flojo arriba donde le costó demasiado generar juego y encima fue poco eficaz.

En lo individual, algunos puntos muy bajos donde sobresale Correa. Es un pibe, y a los pibes del club se los banca cuando erran o cuando se equivocan. Pero el canchereo es difícil de tolerar, sobre todo porque, hasta ahora, es mucho más lo que insinúa que lo que ha mostrado.


Levantar urgente. El verso de la transición o el equipo en formación con el que nos vienen pelotudeando hace 2 años y medio ya nos tiene las pelotas por el piso. Este mercado de pases el club hizo un esfuerzo y el plantel se jerarquizó. Pero lejos de ir ganando en solidez el equipo se derrumba, y hoy tenemos sólo 11 puntos en 8 fechas, siempre con la tabla del promedio de reojo.

Decepción

Estudiantes jugó un muy mal partido y perdió con justicia ante Atlético Rafaela. Fue un equipo sin inteligencia para plantear el partido, sin eficacia cuando tuvo chances de gol, sin solidez en una defensa de muy floja tarea y pura impotencia en el segundo tiempo.

Rafaela siendo un equipo muy limitado ganó el partido con inteligencia y sabiendo sacar ventajas de una cancha y un rival que incitaba a jugar simple y llegar al área contraria en no más de dos toques. En cambio, Estudiantes buscó durante todo el partido llegar mediante la posesión pausada de la pelota, cosa que logró de a ratos en el primer tiempo pero cuando el rival se metió decididamente atrás fue totalmente improductivo.

Pellegrino erró en el planteo y erró la lectura de juego durante el partido. Que Martínez haya salido de la cancha recién a los 20 minutos del segundo tiempo es una muestra de ello. Además, hubo rendimientos muy flojos. Además de Martínez, a quien es difícil no insultarlo, fue muy flojo el nivel de J. Silva (responsable en el gol), Luna, Rodríguez y Carrillo quien se erró dos muy claras. Si los cuatro jugadores ofensivos juegan mal, difícil hacer un buen partido. Pero también hay que sumarle una defensa muy floja y vulnerable a los pelotazos de Rafaela. Rulli de floja respuesta en el gol se reivindicó en el segundo tiempo salvando una derrota que podría haber sido más amplia. El único para destacar fue Gil Romero, mientras que la Bruja alternó buenas y malas, pero tuvo un flojo segundo tiempo como todo el equipo (llamativo que haya jugado los 90 minutos).

Si el punto contra Belgrano había sido un puntito que sumaba poco esta derrota ensombrece el panorama. 10 puntos en 7 fechas ya no es un buen número, y habrá que levantarse urgente de cara al clásico. Pellegrino deberá tomar nota del rival, que suele pararse firmemente atrás para salir rápido de contra. Algo que el juego de este Estudiantes puede llegar a favorecer. De más está decir, que hay que ganar sí o sí, como sea.

Feliz día, maestro

Argentina goleó 5-2 a Paraguay y se clasificó al Mundial de Brasil 2014. Trabajo y humildad de todo el cuerpo técnico para que la Selección cambiara su cara tras años muy duros y hoy se vea, además de un alto nivel de juego (falta mejorar en defensa), una gran unidad del plantel y un gran sacrificio por parte de los jugadores, que contagian como no lo hacían hace muchos años.

Los otros, los contras, a los que les duele... que sigan llorando.

Se viene la camperita en Brasil?

Se lo empató solo

Si el empate en Rosario tenía sabor a victoria, este se siente como una derrota. Sin hacer un gran pertido y sin mostrar solidez atrás, Estudiantes vencía al duro Belgrano hasta que un error insólito de Schunke, realmente increíble, le permitió al rival llegar al empate. A partir de ahí Estudiantes fue puro nerviosismo aunque llegó a inquietar al culo roto de Olave.

Ahora el empate de visitante dejará de ser negocio, y habrá que salir a buscar los tres puntos en Rafaela, en la previa al clásico.

Se festeja y mucho!

Había dejado una buena imagen Estudiantes pese a la derrota que parecía inevitable. Quedaba la bronca por dos chances clarísimas erradas abajo del arco en los minutos finales, pero ya en el descuento apareció el Chavo (¿hace cuánto que no la metía de cabeza?) tras un buen desborde del Patito, que se habia errado una increíble, y Estudiantes logró un merecido empate.

Era una parada bravísima, la más difícil que te puede tocar hoy, y Estudiantes tuvo 20 minutos iniciales excelentes, presionando y manejando bien la pelota. Luego alternó momentos donde mantenía la presión o se replegaba, con algunas fallas defensivas habituales. Tras el 1-0 la lógica se mantuvo, y por momentos se acorraló al rival aunque sin llevar peligro. Justo en los minutos finales fue donde más lastimó (clave el ingreso de Rodríguez) con un remate fallido de Auzqui, un cabezazo al palo y una jugada clarísima desaprovechada por el Patito. En la última encontró el gol del empate, que se festeja muchísimo y consolida el progreso de este Estudiantes que si bien no mantiene su nivel durante los 90 minutos muestra no sólo volumen de juego en ofensiva sino mucho sacrificio.

Estudiantes 2 - 0 Boca

Triunfazo de Estudiantes!

"Saben qué, bosteros? Me chupan la verga" Jorgito.

Buen punto

Era un partido difícil, de visitante ante un rival muy peligroso en ataque. Si bien queda la sensación de no haber aprovechado el tempranero gol de Carrillo la imagen general que dejó el equipo fue positiva por la actitud que mostró el equipo y, a diferencia de los dos partidos anteriores del torneo, un buen segundo tiempo.

El arranque del partido fue inmejorable. Tras una enorme jugada de Damonte que se inicio en la mitad de la cancha, un buen desborde de Jara y un gran pase de primera de Luna a Damonte, la jugada se ensució entre los defensores de Lanús y Carrillo definió magistralmente de chilena para meter el primero.
Luego del gol Estudiantes siguió insistiendo por el mismo lado y lastimó, mientras Damonte se hacía dueño de la mitad de la cancha. Pero en un pelotazo frontal fallaron Vergini, Aguirregaray y Rulli y Lanús llegó al empate. A partir de ahí Lanús manejó la pelota y Estudiantes se limitó a pararse para salir de contra, aunque no dio muestras de solidez defensiva.

En el segundo tiempo la imagen fue otra, Estudiantes se paró más adelante y el partido se tornó muy parejo. Ya en los últimos minutos sorprendió la presión que ejercía Estudiantes en la salida del rival y controló buena parte del tramo final del partido.

Fue un buen partido de Carrillo que, además del gol, ganó mucho de arriba y pivoteó muy bien. Damonte en su presentación mostró mucha actitud y entrega en la marca, aunque debería cuidarse más con las faltas, pero sorprendió principalmente a la hora de la distribución donde si bien tuvo errores se mostró muy criterioso y preciso. Franco Jara mostró cosas interesantes y parece ser un buen acompañante de un 9 de área.
Vergini a pesar de cierta complicidad en el gol de Lanús estuvo muy firme y seguro mientras que ya no sorprende la solidez de Silva.


El domingo frente a Boca habrá que hacer valer este punto, pero en líneas generales si bien continúan las fallas defensivas, el equipo mostró otra actitud y se vio punzante en ofensiva. Con el 4-4-2 Carrillo no queda tan aislado aunque se priva de incluir a Correa o Rodríguez como titulares en ese tridente ofensivo antes del delantero.

Estudiantes 0 - 1 All Boys

Estudiantes perdió 1 a 0 por los cuartos de final de la Copa Argentina en un pésimo partido en el que no se vio nada de lo positivo que se había destacado en los partidos anteriores. 

Así como se han destacado los logros del actual DT hay que decir que es el principal responsable de la derrota de hoy. Pellegrino muestra algunos vicios típicos de Bielsa en mantener un esquema de juego sin importar las circunstancias, los jugadores disponibles y el rival.

Uno no conoce la actualidad física de cada jugador, la única forma de la cual se podría entender que hoy hayan jugado de titular Mariano González y Auzqui, relegando a Luna al banco.

Más allá de la responsabilidad del DT obviamente hay falencias individuales. Carrillo siempre ha mostrado limitaciones y encima jugar bajo la sombra de Zapata no debe ser algo favorable. Mariano González sólo entrega algo de esfuerzo y un poco de disciplina en bajar a marcar, pero su titularidad es inexplicable bajo cualquier punto de vista (excepto el del DT). Por último el caso de Román Martínez, que cada día juega peor y para colmo hoy demuestra su total falta de compromiso en el inicio de la jugada del gol rival.

Preocupante el nivel de Estudiantes, se verá el lunes si hay que encender la alarma o si fue sólo un partido típico de esta Copa Argentina donde muy pocos equipos juegan bien. No podemos volver a la Verón-dependencia y hay jugadores que están directamente para jugar en la Reserva.

Estudiantes 1 - 0 All Boys

Victoria clave de Estudiantes en la segunda fecha del torneo. El primer tiempo fue muy bueno, si bien por momentos faltaba profundidad al toqueteo se jugó muy cerca del arco rival y se exigió a un flojo arquero con varios remates de media distancia. En un remate fuerte al medio de Gil Romero la pelota se le escapó y decretó el 1 a 0. Primer gol en primera del pibe que además se comió la cancha.

En el segundo se volvió a ver algo parecido al partido en Sarandí (aunque esta vez con los 11 jugadores), un equipo mucho más retrasado ante el avance del rival que ahora buscaba el empate. Hubo ratos de mucha zozobra en la defensa y se perdió volumen de juego con los cambios: Martínez por Verón (obligado) y Auzqui por Luna, de buen partido.

El DT en ningún momento apela al cambio de esquema, por lo que se torna muy riesgoso jugar "metidos atrás" con un 4-2-3-1 en el que los volantes externos tienen muy poco oficio para la marca. Cuando All Boys llevó peligro los defensores respondieron bien y otra vez se vio a un Rulli muy seguro, excepto cuando le toca jugar con el pie, un riesgo innecesario que corre el equipo partido tras partido.

Se vieron en cancha varios refuerzos: Vergini se acomodó muy rápido y se mostró seguro, Goñi con un comienzo impreciso se afianzó y cerró un buen partido, Luna sigue mostrando sus condiciones y es titular indiscutido mientras que el vasquito uruguayo Aguirregaray jugó un excelente partido (el contraste con el lateral del torneo pasado es muy fuerte).

Sin dudas los refuerzos (faltan Rodríguez y Damonte que peleará el puesto en el medio) han jerarquizado al equipo (ni hablar de Verón). El problema será si se confirma la venta del Negro (hoy de flojo partido).

Triunfo clave para arrancar tranquilos el torneo. El miércoles de nuevo con All Boys para buscar el pase a las semis de la Copa Argentina y luego el lunes (feriado) ante el duro Lanús de Guille (hubiera sido mejor enfrentarlo en las fechas finales donde siempre arruga).

Se escapó

Empate 1 a 1 en un partido totalmente desvirtuado por un penoso árbitro con antecedentes nefastos.

Por ser el primer partido el equipo mostró un nivel más que aceptable, aunque rápidamente se vio beneficiado por la insólita expulsión del jugador de Arsenal. Con el gol del Negro se puso arriba y manejó completamente la pelota, aunque Arsenal, como siempre, lastimaba con las pelotas paradas. Finalizando el primer tiempo el árbitro compensó su error y echó injustamente a Jonathan Silva.

El segundo tiempo fue distinto, con Estudiantes mucho más retrasado y se invirtió la tenencia de la pelota. Sobre el final en una jugada sucia con cierta fragilidad defensiva al no sacarla, un penal tras la mano de Jara (y su expulsión) le dio el empate a Arsenal.

Da bronca porque estaba todo dado para ganarlo, en una cancha dificilísima. Sin el Negro cuesta imaginar cómo jugará Estudiantes (si bien faltan Luna y Rodríguez en ofensiva), Carrillo entró un par de minutos y se equivocó las dos veces que tocó la pelota.

Ahora el miércoles contra All Boys.

Paso a Paso (V)

Como siempre, el agradecimiento a Fotos del Estadio donde ELB (o Gustavo) sube seguido los avances en el estadio.

¡A cuartos!

Estudiantes le ganó 2 a 1 a Quilmes y llegó a los cuartos de final de la Copa Argentina, donde jugará frente a All Boys, por ahora el 17 de agosto.
A Estudiantes no le sobra nada, y si se va Zapata le va a faltar mucho. Hoy con sus dos goles y una gran actuación se maquillaron las limitaciones de juego que venía mostrando el equipo en los amistosos previos. Esta vez, se mostró más firme en defensa, salvo por el error compartido entre Rulli y Presentado (que había jugado muy bien) que le permitió el empate transitorio a Quilmes.
En cuanto al juego se lo vio limitado y con muchas imprecisiones, pero en ningún momento fue menos que su rival. Sacando la figura de Zapata sólo Luna aportó juego en ofensiva, aunque se diluyó en el segundo tiempo. Mariano González se pareció al de antes mientras que Auzqui de no ser por el centro a Zapata en el gol, habría completado un partido lleno de errores. Por otro lado, a Román Martínez ni la chance de ser capitán lo compromete con el juego. Esta vez sin excusas porque jugó donde él dice sentirse más cómodo.

En un mercado de pases llenó de desprolijidades (la súbita rescisión de Angeleri, la cual celebramos, mientras que Modón fue dado a préstamo es un ejemplo claro de lo mal que se maneja el club) Estudiantes deberá acertar con los próximos refuerzos para darle mayor solidez al equipo, y que la responsabilidad no caiga toda en pibes con un par de partidos en Primera. Demás está decir que si se vende a Zapata el no traer a un delantero de jerarquía sería muy arriesgado.

La ciudad está en orden

6 meses antes:

La Gloria

Se cumplen cuatro años de la cuarta Libertadores. Cada año que pasa, cada fracaso de otro equipo argentino agiganta la hazaña de haber dado la vuelta en Brasil.

El partido completo:

Chapu, Chapu, Chapu! Huevo, Huevo, Huevo!

Se va uno de los mejores jugadores de la historia de Estudiantes.

Simplemente Gracias Chapu

Empate para cerrar

Empate 1-1 frente al duro Belgrano para cerrar el torneo con 20 puntos, 48 en la temporada. Un número que de cara al futuro no permite relajarse en ningún momento, pero que parecía lejano hace unos dos meses cuando asumía Pellegrino como DT.

El partido se puso cuesta abajo rápidamente ante la eficacia del rival para convertir en su primer llegada, pero a diferencia de lo sucedido en San Juan tras el gol rival Estudiantes reaccionó bien, buscando permanentemente el empate, aunque sin mucha profundidad excepto en un mano a mano de Zapata tras una gran jugada de Jara. En el segundo, rápidamente llegó al empate tras una jugada de banda a banda: primero tiró el centro Silva, y tras el rebote Braña la abrió hacia la derecha para que Jara se la deje a Modón, quien tiró un centro excelente para un gran cabezazo de Carrillo. La participación de los laterales en ataque, aunque con muchas imprecisiones, sin dudas es una marca que el DT le aportó a este equipo.

Luego del empate Estudiantes siguió buscando aunque paulatinamente el ritmo del partido fue diluyendo hasta estancarse, si bien tuvo oportunidades para llevarse los tres puntos tras un gran tiro libre de Benítez, o una jugada rápida luego de un lateral donde Schunke no pudo dominarla cuando quedaba sólo frente al arquero que supo comerse siete goles hace unos.. siete años.

Pellegrino cambió el esquema tras las ausencias de Auzqui y Martínez y probó con dos puntas por primera vez, con Duván y Carrillo, mientras que delante de Braña y Benítez jugaron por izquierda Correa y por la derecha Jara. Tras la ausencia de Angeleri jugó Modón, tanto él como Silva aportaron mucho en ataque, aunque flaquearon en defensa. 

En la política deportiva del club, es imposible dar una explicación futbolística sobre por qué se elige traer un jugador que no juega hace 2 años como Angeleri, con un sueldo elevado y un rendimiento paupérrimo, mientras no se le dan chances a un juvenil como Modón. Lo mismo pasó con Gil Romero, que siempre que entró jugó bien y sin embargo muchas veces le tocó ir al banco porque jugaba Gelabert.

Jara y Correa intercambiaron buenas y malas pero cumplieron (el ingreso de Núñez por Jara fue arriesgado, ya que le dejó al rival demasiados espacios por su izquierda, donde más lastimaba) mientras que Carrillo si bien no tenía un buen partido, en la que tuvo la mandó a guardar.

El Chino en lo que parece haber sido su despedida tuvo su mejor partido en bastante tiempo, y cargó contra los dirigentes por la falta de consideración. Si bien es más que lógico la no-renovación a un jugador de sueldo elevado y flojo rendimiento durante dos años (caso similar a Desábato o la Gata) el maltrato de los dirigentes (que viene de hace tiempo) es algo inentendible con un jugador que ganó tres campeonatos y vistió la camiseta de Estudiantes durante la segunda época más importante de su historia.

Estudiantes cerró así dignamente un flojísimo campeonato. Con 98 puntos, un arranque como el último significaría verse en las últimas posiciones en los promedios. Esta vez no se puede subestimar la situación como en el anterior mercado de pases, pero tampoco puede volver a cometerse otra vez el mismo error de traer jugadores en baja con sueldos altísimos provenientes de Europa, con más nombre que rendimiento.

Tres puntos fundamentales

Estudiantes cumplió y mantuvo el 2 - 0 sobre el Lanús del Mellizo, condenándolo a otro subcampeonato (1996, 2006, 2012, 2013). 

"Sé cómo juega Estudiantes, siempre al límite de la ley con el tiempo y las pelotas que hay que reponer. "

Fue un buen "medio" partido, defendiendo el resultado y buscando no meterse excesivamente atrás. Si bien Lanús llegó un par de veces en el segundo tiempo, nunca pareció amenazado el triunfo y pudo haberse aumentado la diferencia de contra.
Monumental lo del Chapu Braña, bien acompañado por Gil Romero y un Benítez bastante retrasado que manejó bien la pelota y los tiempos. La zaga central improvisada tuvo un buen partido (primera vez de Sarulyte con Pellegrino) y fue importante el aporte de Jara y Auzqui, esta vez mucho más comprometidos con el trabajo defensivo. Rulli se recuperó bien del error del sábado y se mostró muy seguro.

Buen planteo y buena ejecución para lograr puntos claves de cara a la próxima temporada y levantar el ánimo luego del muy mal partido en San Juan. Se llegó a 47 puntos, algo que todos firmábamos sin pensarlo cuando asumió Pellegrino, y habrá que buscar 3 puntos igual de importantes ante Belgrano en la última fecha.

Un partido del ciclo Cagna

Flojísimo partido de Estudiantes, muy similar a los primeros partidos del campeonato. Si bien no empezó mal, manejando la pelota y generando una muy clara con un cabezazo de Martínez al palo, el gol sanjuanino tras un grosero error de Rulli desmoronó al equipo que nunca se mostró en condiciones de igualarlo.

Luego del gol de Luna y durante todo el segundo tiempo se vio un equipo tibio, que apenas pudo inquietar al rival con algún corner, y que quedó rápidamente descompensado con un extraño cambio del técnico: Gastón Fernández (que tras su insólita expulsión volvió a defraudar) por Gil Romero, de buen partido; quedando un doble cinco sin mucha marca con Benítez y Martínez. Tras la lesión del Chavo entró Schunke, quien ganó en el área rival pero cometió el error que permitió el gol de Penco (¿te acordás Lobo?), y luego entró Jara por Angeleri, quien se fue golpeado y que salvo en el centro a Martínez, demostró lo mismo que durante toda esta temporada dando una imagen de ex-jugador.

Habrá revancha rápido el miércoles, donde habrá que mantener la ventaja contra Lanús. Luego, recibir al duro Belgrano. 6 puntos imprescindibles para llegar a los 50 en la temporada, y arrancar con más aire la próxima.

PD: Chau Rojo, te vamos a extrañar. Buena suerte con el paladar negro en el Nacional B.

Estudiantes 2 - 0 Lanús (Suspendido por incidentes)

Difícil comentar ante esta situación. Cuando promediaba el primer tiempo se desarrollaron confusos incidentes en la tribuna visitante, en los que falleció un hincha de Lanús a causa de una brutal represión de la Policía Bonaerense. El partido continuó, Estudiantes no jugaba bien, pero en una bendita pelota parada el Chavo anticipando y de sobrepique metió el primero, a partir del cual el partido cambió y Estudiantes empezó a jugar realmente muy bien. Amplió la ventaja con un golazo tras cambio de frente de Benítez, bajada espectacular de Correa y un gran taco para Silva quien metió un centro milimétrico que aprovechó Zapata. Estudiantes siguió manejando bien la pelota hasta el final del primer tiempo.

Tras un prolongado entretiempo se confirmó la suspensión del partido, el segundo en esta fecha, en un fútbol donde cada vez hay más violencia e insólitamente la mayoría no es provocada por el choque entre hinchadas diferentes sino por internas o problemas con la Policía, cada día más inoperante.

Desde el aspecto deportivo, un garrón para Estudiantes que iba a salir al segundo tiempo en alza y con un nervioso Lanús. Ahora a esperar cuándo se juega (seguramente a puertas cerradas), posiblemente sea pronto ya que Lanús pelea el campeonato.

A 30 años del Nacional 1983

Honrando nuestra historia

Texto sacado del blog Un Metro Adelantado, escrito por quien cubre a Estudiantes.

Vení, pibe. Sentate que tenemos que hablar. Qué es eso de que te aburrís viendo a Estudiantes. Me contó tu vieja, no te hagas el distraído, mirame cuando te hablo. ¿Cómo es eso? A ver... explicame. ¿Qué? ¿En serio me decís? ¿Vos te pensás que tienen razón esos pibes? ¿Vos te pensás que ser vistoso es jugar bien al fútbol? Estás equivocado, pibe. Sí, ya sé que con Verón en cancha era otra cosa. ¿Pero qué tiene que ver? Nosotros somos muchos más grandes que un jugador. ¿Querés que te cuente lo que viví yo? ¿Eh? No tengo que ir tan atrás para darte un ejemplo. A finales de los 90 con los equipos de Hernández, Ferraro y Solari. Ahí tenés. ¿Sabés lo que fue aguantar esa seguidilla? Por cada pase que los jugadores se daban entre sí nos emocionábamos casi hasta las lágrimas. Sí, en 1 y 57, en nuestra propia casa.

El fútbol es otra cosa, pibe. No es lo que hacen ustedes en educación física de tirar la pelotita para arriba y divertirse. ¿Sabés por qué hacen eso los profesores? ¿Eh? ¿Te preguntaste alguna vez? Porque no quieren trabajar. Porque es más fácil hacer eso que enseñarles cosas en serio. ¿Te pensás que en Primera es distinto? No, pibe. Es igual. Y encima fomentado por los medios. ¿O te pensás que es casualidad? No. Ellos quieren goles, ellos quieren espectáculo, ellos quieren vender. ¿Entendés? Y nosotros nunca vendimos, pibe. Por eso siempre nos atacaron, por eso siempre fuimos esa espina en el culo del periodismo, fuimos esos preceptos molestos que refutaban su teoría lírica del fútbol. ¿Me seguís lo que te digo?

Los equipos se arman de atrás para adelante. Históricamente salen campeones los que menos goles en contra tienen. El fútbol no es sólo habilidad. También es estrategia, es táctica, es físico... es eficiencia. ¿Sabés a qué me refiero con eficiencia, pibe? A que hay que obtener el mayor resultado posible con los recursos disponibles. Y hay que adaptarse y trabajar porque los recursos son escasos. No siempre se puede jugar como uno quiere. ¿O no te acordás lo qué pasó en el 2010 con Sabella? En el primer semestre teníamos, quizás, el equipo más vistoso de la historia de Estudiantes. Con Clemente, Sosa, Benítez, Verón, Enzo Pérez, la Gata y Boselli. Y no ganamos nada. ¿Te acordás? Ese sí que le gustaba a los medios, ese equipo sí que era bien visto. Pero no ganó nada. El semestre siguiente fue distinto, nos adaptamos y salimos campeones con un equipo que hacía un culto de la eficiencia. Sí, el de Rojo y Mercado por los costados. Ese mismo. No nos pateaban al arco. Jugábamos con un solo punta y no nos sobraba nada. Todos los medios haciendo fuerza para que saliera campeón Vélez por ser el que mejor desplegaba "fútbol". ¿Entendés lo que te digo? Lo que ellos consideran fútbol, no lo que en realidad es. Y al final, el campeonato fue nuestro.

Es así, pibe. Un día jugás de una manera, otro día jugás de otra. Lo importante es darse cuenta que no siempre se puede jugar igual, que hay que saber adaptarse para ganar. Lo importante es darse cuenta que para jugar bien al fútbol hay que saber atacar y defender, no sólo atacar. Lo importante es que entiendas que hoy estamos en la búsqueda de un estilo que llevará su tiempo perfeccionar. Quizás debamos tomar más recaudos de los normales, pero son necesarios. ¿O preferís lo que nos pasaba al principio del torneo? ¿Eh? ¿Preferís eso? Más vale que no. Es un deshonor que un club con la historia de Estudiantes sea vulnerado defensivamente de la manera en que nos venía pasando. Yo no quiero ver a 11 tibios deportistas penar en una cancha intentando practicar el fútbol que quieren los medios. Yo quiero 11 soldados, quiero 11 guerreros tácticos que luchen cada pelota como si fuera la última, que defiendan a sus compañeros como si fueran hermanos, que entreguen su corazón por la causa.

No te comas el chamuyo de la gilada, pibe. No te confundas con los espejitos de colores que te quiere vender la multitud. El abuelo, vos, yo... somos distintos. Acordate lo que te cuento siempre de ese grupo de heroicos muchachos dirigidos por Zubeldía. Sí, de los mismos que te hablaba el abuelo cuando todavía estaba con nosotros. Solos contra todos, pibe...

Dr. Bidón

Empate que se disfruta

Por historia, por rivalidad, por choques viejos y por otros recientes, hoy no se podía perder. Si bien la victoria hubiese sido un goce total, el empate es un empujoncito a Independiente hacia el descenso (aunque con Argentinos todo puede pasar).

En cuanto al juego, cosas positivas y negativas. 6 partidos invicto, 540 minutos sin recibir goles. Habiendo arrancado como se arrancó, esto parece mentira. Si bien no es que la defensa transmite una solidez inquebrantable, los números mandan y es una marca impresionante, con un arquero que sigue creciendo.

El equipo tiene orden, siempre comparando con el conducido por Cagna, pero se muestra inofensivo salvo algunos tramos del partido, principalmente con un flojísimo rendimiento de quienes deben atacar por las bandas (pocos aciertos a la hora de los centros). Hoy no se entendió por qué Gelabert jugó donde jugó, ya que es limitado para jugar de 5, si juega de enganche esto se potencia. Núñez con un par de centros aceptables no tapó un rendimiento desastroso, acentuado en los últimos minutos donde hizo todo mal. Auzqui, no fue muy distinto aunque con mayor sacrificio en la marca. Buen partido de Braña, aceptable lo de Benítez y con un Zapata sin peso.

Atrás, Silva cumplió mientras que Angeleri si bien ha mejorado, da la impresión de que lo desbordan con suma facilidad. Otro buen partido de Desábato. otra vez más sólido que Ré.

Un punto que por la situación del rival se festeja, una valla invicta que nos da satisfacción, pero hace falta subir un escalón en el rendimiento, obviamente en la faz ofensiva. Quizás sea hora de buscar alternativas por las bandas, o cambiar el 4-2-3-1 asumiendo que no hay jugadores para cumplir esa función (hoy obviamente al jugar Gelabert se extrañó mucho a Martínez). Quedan tres partidos, claves para la próxima temporada. 

Se fue el Negro

Falleció el Negro Aguirre Suárez, figura clave en el equipo de Zubeldía, aguerrido, un símbolo de Estudiantes de La Plata, preso por dejar todo por el club.

-En su momento marcamos una etapa en el fútbol. Y si esto sirve para las próximas generaciones, que valga. Íntimamente esto se disfruta, sin dudas, pero de allí a que se transforme en algo rimbombante, es demasiado.

-Yo rescato de aquello la emoción de la gente. Ver la ciudad embanderada. Eso es lo que más me conmovió. Futbolísticamente uno andaba acelerado y me fui a Europa... No quiero decir con esto que aquello quedó en la nebulosa pero lo de la gente será imborrable para mí.

-Osvaldo Zubeldía fue un ejemplo total. Esto es lo que él dejó. A mí me marcó mucho. Me dejó enseñanzas que apliqué en su momento como jugador y también me dejó cosas para mi carrera como director técnico.

-Estuve siete años en Estudiantes. Fueron tan intensos como imprevistos, verdad, por las circunstancias que se fueron sucediendo. Llegué para jugar en las inferiores, con la tercera fuimos subcampeones y a partir de allí ganamos todos los títulos que se conocen.

-Aquel equipo tenía mucha disciplina. Creo que en todos los órdenes, si no se marca una disciplina es muy difícil conseguir logros.

-He pasado muchos momentos tristes. Estuve preso por el fútbol, salí muchas veces de una cancha acosado por el público. Pero el día que me fui de Estudiantes sentí realmente tristeza. ¡Y eso que no iba para Europa! a un buen club y atraído por un buen contrato. Pero uno sentía que al partir algo muy lindo quedaba atrás para siempre.

-Aquel equipo llegó a lo que llegó porque, insisto, tenía una disciplina. Había un orden, disciplina y respeto, pero fundamental con humildad, esas cosas marcaron en nosotros todo lo que logramos.

-Sacando la excepción de Verón, los demás fuimos obreros... Él se salía fuera del libreto.


Frases tomadas del blog Mazy Pincha

Varios pasos para atrás

Luego de dos victorias y de un gran rendimiento contra Rafaela, Estudiantes decepcionó y mucho jugando contra el peor equipo del torneo, prendido fuego por los escándalos y amenazado por el descenso.

Un equipo que se paró bien atrás y le dio la pelota a Estudiantes, pero estuvo lejos de ser un canto a la solidez, y en los primeros minutos (lo mejor de Estudiantes, o mejor dicho, lo único bueno) se vio su fragilidad en defensa.

Por el lado de Estudiantes, flojísimo individual y colectivamente. Ni Benítez (más retrasado) ni Martínez (más libre) cumplieron el rol de armador, que recayó en un Braña que en los últimos tiempos se ha acostumbrado a no reconocer sus limitaciones a la hora de armar juego, y si bien arrancó correctamente se fue diluyendo y reincidiendo en imprecisiones. Martínez cumplió un aceptable primer tiempo, pero lo de la segunda parte fue particularmente malo y con una extraña posición (muy atrás) una vez hecho los cambios.

Como hace un buen tiempo, el principal problema estuvo en las bandas. Silva venía levantando su rendimiento, mostrándose más sólido; hoy estuvo flojo en los anticipos y muy impreciso en las proyecciones, lo de Angeleri fue más de lo mismo. Tanto Auzqui como Núñez tuvieron un partido muy flojo, lo que explica en parte la falta de peligro que generó Estudiantes (un tiro al arco en el primer tiempo, otro en el segundo y poco más). Núñez se cansó de equivocar el camino, mientras que lo de Auzqui fue pura intrascendencia. El Negro sólo no puede, pero esta vez se lo vio menos activo que en otros partidos de similar aislamiento. Correa entró bien, y parece ser una buena alternativa para darle lucidez al ataque. 

Dos puntos importantes que se dejan en el camino, que podrían haber sido tres de no ser por una excelente respuesta de Rulli en la única llegada del rival. Es sabido que Estudiantes no se siente cómodo cuando debe ser protagonista, pero se muestra demasiado inofensivo. Hoy el resultado no fue bueno y la crítica sobre el rendimiento se acentúa, a diferencia del último partido de local con Unión, cuyo primer tiempo fue tan espantoso como lo de hoy.

Párrafo aparte para Gastón Fernández, que tocó fondo y es muy triste su situación cuando uno recuerda las alegrías que nos dio. Un jugador que hace 2 años no tiene un rendimiento aceptable y significó para el club una erogación monetaria desorbitante teniendo en cuenta la delicada situación económica en la que se encuentra y en los problemas reglamentarios del jugador.

Paso a Paso (IV)

Poco a poco avanza la construcción del estadio.
Fotos del 18 de mayo, sacadas del Facebook Fotos del Estadio (click para ver más fotos), a cargo de ELB.

Te estamos esperando

Lo mejor en mucho tiempo

Gran partido de Estudiantes y un histórico 2-0 en la cancha de Rafaela, tras 12 partidos sin ganar de visitante. Esta vez al triunfo le sumó una importante mejoría en el nivel de juego, mientras que si bien falla en defensa (la pelota parada..) otra vez volvió a terminar con la valla invicta, esta vez sin que Rulli sea exigido.

Los primeros 30 minutos fueron de muy buen nivel, con posesión de pelota, precisión en los pases y la intención de atacar con muchos jugadores; tras un pase largo (o pelotazo) del Chavo, Román Martínez la bajó muy bien de cabeza asistiendo a Zapata quien remató de una y convirtió el primero.

Los últimos 10 minutos del primer tiempo Rafaela presionó más y Estudiantes dejó de sentirse tan cómodo con la pelota; el segundo tiempo fue similar, con un Rafaela presionando y Estudiantes reventando la pelota sin precisión como para lograr un buen contraataque. Pese a esto Rafaela no llevó peligro excepto en los numerosos corners por el lado izquierdo, donde en la mayoría de las ocasiones cabeceó un jugador local; algo que sin dudas deberá trabajar y mucho el cuerpo técnico.

Cuando se moría el partido Martínez se llevó la pelota hacia la derecha, metió una pausa y habilitó a Jara (entró por Núñez) quien tiró un buen centro pasado que Auzqui bajó para Carrillo, que con una buena media vuelta exigió a Sara que dio un rebote que le quedó servido a Martínez.

Tres puntos importantísimos, 10 de los últimos 12, vitales para la próxima temporada.
En líneas generales todos cumplieron un buen partido. Para destacar la firmeza del Chavo, la consolidación de J. Silva y la eficacia de Zapata. Benítez entró sorpresivamente de titular, y cumplió un correcto partido alternando una buena distribución de la pelota con fallas en una zona complicada como para arriesgar, además de meter bastante a la hora de recuperar.

Las figuras fueron Braña y Martínez. El primero corrió y metió como loco, como nos supo tener acostumbrados y se muestra en un nivel bárbaro. El segundo, asistencia, gol, y de a ratos se puso el equipo al hombro que es lo que le pedimos. Si bien con Unión no jugó bien, en los partidos anteriores había demostrado cierta levantada.

La próxima, otra vez un lunes, contra el golpeado Argentinos. A confirmar la levantada.

Triunfo valioso

Estudiantes jugó horrible, ante un rival débil y con un primer tiempo particularmente espantoso. Tuvo algunos errores en defensa pero por tercera vez en cinco partidos del ciclo, terminó con valla invicta. Lo peor estuvo en la posesión, el juego asociado y la ofensiva. Muy impreciso, falto de ideas, con algunos jugadores muy bajos.

Pero ganó. Uno a cero, gol de Zapata en un enorme anticipo, en un buen centro de Núñez (tuvo tres centros peligrosos, lo que no es poco en un partido tan desastroso) y una excelente habilitación de Correa que recién había entrado.

Tras uno de los peores arranques de la historia, sacar 7 puntos de los últimos 9 no es poco. Lo primero, lo urgente, era sacar puntos y armar una defensa sólida. Tras la confianza y el impulso anímico que dan estas victorias, esperemos que venga acompañado una mejoría en el juego.

La próxima, una parada bravísima en Rafaela que viene de 7 partidos sin perder. Luego en La Plata contra el golpeado Argentinos; Independiente, Lanús, San Juan y cerrando con Belgrano de local. Sacar 10 puntos, hoy por hoy, sería cerrar una campaña más que dignamente y con un importante colchón de puntos para la temporada que viene.

Punto que suma

Estudiantes tal vez no haya jugado bien, pero se trae un punto de una de las canchas que más le cuestan. Y plantó un partido parejo ante un duro rival, hasta que se vio superado por la inferioridad numérica tras la extraña expulsión de Gelabert, de mal partido.

En el aspecto defensivo si bien sigue sin mostrar solidez se ve cierta mejoría, por lo menos individual en el caso de Desábato, aunque siempre con errores puntuales en los que en estos partidos estamos ligando, o nos salva el arquero. La principal mejoría se vio en el juego de posesión, Estudiantes "cuidó" la pelota como hace mucho no lo hacía, quizás sin la profundidad necesaria pero con mayor precisión, con proyecciones de los laterales y un Braña que en su vuelta fue muy importante para la distribución de la pelota.

Mientras tanto hay jugadores que ya colman la paciencia, particularmente Gelabert y Angeleri, este último flojo con la pelota, flojo con la marca. Silva mejoró respecto a sus últimos partidos y se mandó mucho más al ataque, Martínez apareció muy de vez en cuando, pero cuando lo hizo llevó peligro. Núñez estuvo muy contenido mientras que Auzqui se mantuvo amenazante todo el partido. Duván bastante sólo como de costumbre estuvo poco fino.

El punto sirve, o mejor dicho servirá, en el caso de ganarle a Unión. La mano del técnico se va notando de a poco, con su esquema predilecto y hoy notablemente con un a veces exasperante intento de salir jugando siempre con la pelota al piso desde el fondo, lo que a veces fue demasiado peligroso y poco productivo.

A octavos

Estudiantes le ganó 2 a 1 a Atlético Tucumán, en Catamarca, y pasó a los octavos de final de la Copa Argentina, donde jugará con Quilmes. Los goles fueron de Duván Zapata apenas comenzado el partido y de Maxi Núñez en el segundo tiempo.
No se jugó bien, algunos jugadores mantuvieron su nivel flojísimo, y este flojo rendimiento obviamente se ve agravado por ser un rival del Nacional B, que mostró todas sus limitaciones, principalmente en defensa. Ni bien comenzado el partido Martínez se encontró con la pelota en tres cuartos y sin marca tucumana y metió un buen pase para Duván Zapata, muy mal marcado por la defensa rival, quien convirtió el primero. Pese al gol tempranero y tranquilizador, los tucumanos manejaron la pelota y lastimaron dos veces, con soberbias respuestas de Rulli. Luego Estudiantes emparejó el trámite y en el segundo tiempo primero avisó con un cabezazo de Duván y luego tras un centro desde la izquierda le quedó bollando la pelota a Núñez que fusiló a Luchetti. Tras el 2 a 0 Estudiantes se tranquilizó, empezó a tocar y pudo liquidar el partido pero falló, primero Jara con el pase y luego Núñez que se resbaló increíblemente cuando quedaba mano a mano tras un pase del Chino Benítez.
Tras el descuento de Tucumán el equipo retrocedió y su rival buscó sin claridad el empate. Tuvo varias aproximaciones donde no estuvieron finos y faltando muy poco un remate de media distancia que se desvió encontró otra buena respuesta de Rulli, la figura.

Otro triunfo, para trabajar más tranquilos y buscar una mejora en el rendimiento, que volvió a ser flojo. Tras una larga sequía, ganar no es poco. Y teníamos presente la mala experiencia con Deportivo Merlo el año pasado, aunque esta vez se jugó con titulares. Ya se está rápidamente en octavos de final, en una Copa que clasifica a la Libertadores. Otro tema será si a Estudiantes visto el flojo promedio con el que arranca, le conviene jugar esta Copa.

Desahogo

Ganó Estudiantes la puta que lo parió! Después de 11 partidos, 1 a 0 a Boca (gol de Núñez).

Seguro habrá mucho para analizar, no se vio una mejoría en el equipo (jugando contra los suplentes de un Boca espantoso que acaba de lograr la peor racha de su historia) aunque por momentos se vio mejor orden. Y a diferencia de otros partidos, se vio una mejora en el segundo tiempo. Monumental lo de Rulli, sostén del triunfo. Pero hoy, qué carajo importa, nosotros más que nadie sabemos que lo único que importa es ganar.

Había que ganar como sea (aunque a algunos líricos no les guste el término). No se iba a salir de esta racha jugando bien, pero había que ganar. Ahora, tiene que venir la mejora en el rendimiento, un poco más aliviados tras romper la racha.

En cuanto a los rendimientos individuales es alarmante el rendimiento de Ré, que está logrando jugar peor que Desábato. Lo de Angeleri también es muy bajo, pero estamos más acostumbrados; hoy tuvo algunos cruces vitales (tras un rebote de Rulli), pero flojísimo en la marca, en la proyección, en los laterales, en los rechazos, le comían la espalda, etc.. Correcto partido de Silva y lamentablemente se viene a lesionar Gil Romero, que sigue mostrando grandes condiciones. Lo de Gelabert es cosa repetida, aunque tuvo mucho sacrificio en el segundo tiempo, Núñez repetía sus limitaciones en el primer tiempo, mejoró en el segundo y estuvo donde tenía que estar para meter el gol. Buen partido de Auzqui, corriendo, presionando, quitando, marcando un gran contraste con la apatía de la Gata. Bien el Negro, clave en el gol, aunque no está tan afilado como a principio de campeonato.

El jueves contra Atlético Tucumán en Catamarca, esperaremos a ver qué equipo para Pellegrino (si mecha titulares con suplentes o pone un equipo totalmente alternativo repitiendo lo que hizo Azconzábal el año pasado), y el lunes una parada bravísima en Floresta. Hoy, a festejar.

Ruso, siempre con nosotros

El sábado, cuando Estudiantes reciba a Boca, se estarán cumpliendo 11 años sin el Ruso Prátola, símbolo de Estudiantes.

Nota de La Nación:

Aguerrido, decidido, sólido. Un símbolo de la escuela de Osvaldo Zubeldía, un defensor que burló la técnica a fuerza de coraje y corazón. Así fue Edgardo Prátola, futbolista. Un emblema de Estudiantes. Ganador, siempre ganador.

Compañero, generoso, valiente. Aferrado a su familia, a sus afectos, convencido aun cuesta abajo de que la esperanza no era una quimera. Peleador, luchador hasta el final. Así fue Edgardo Prátola, el Ruso, el hombre que supo ganarse el cariño de todos. Ganador también fuera del campo de juego.

El 12 de abril de 2001, Prátola confesó que padecía cáncer de colon, en un testimonio que despertó la sensibilidad de todo el ambiente del fútbol; se lo habían detectado un mes antes. Desde entonces peleó y peleó contra la adversidad, sumó afecto en cada exposición pública y nunca se dio por vencido. Casado con Ana Laura y padre de dos hijas, Camila, de tres años, y Lara, de 11 meses, se aferró a los suyos con la ilusión de volver, algún día, a los campos de juego.

Con los botines a medio colgar, se preocupaba con el desteñido presente económico; y hasta se ilusionaba con un buzo de DT, para enseñar la mística que aprendió cada mañana en City Bell. “Pude ahorrar algo. Pienso en eso porque soy joven y si no juego al fútbol tengo que vivir de otra cosa para mantener a mi familia. Me di plazo hasta fin de año para ver cómo conseguir algún ingreso. Si puedo jugar al fútbol el año próximo, explotaré mis últimos cartuchos. También tenía pensado hacer la carrera de DT, pero con lo de la enfermedad se complicó. El año que viene sí lo voy a comenzar”, le decía Prátola a La Nacion, en una nota publicada el 25 de agosto de 2001.

Fanático del Pincha, su último encuentro tuvo el sabor de lo inolvidable: el 11 de marzo de 2001, Estudiantes venció a Gimnasia, el clásico rival, por 2 a 1. El Ruso, semanas atrás, ya había perdido bastante peso y su presencia estuvo en duda hasta minutos antes. Pero él mismo pidió jugar, acaso con la convicción de que sería la última vez.

“Con Gimnasia jugué con cuatro kilos menos. Tenía que tomar laxantes para ir de cuerpo y llegó un momento en que le dije al médico de hacer los estudios. Me operé a los diez días y ahí se enteraron mi mujer, que estaba embarazada de ocho meses de Iara, y Micaela. Diez días más tarde me enteré yo; mi mujer se puso a llorar. El médico me lo dijo y pensé que era boleta, que no iba a poder disfrutar a mis hijas. Llegué a mi casa y cuando abrí la puerta estaba mi nena con mi cuñada viendo una película, y me dije: “No me puedo quedar. Tengo que salir a pelearla también por la que venía”. Decía Prátola, en la citada entrevista.

Lo aplaudieron todos aquella noche del 22 de enero último, cuando Estudiantes le ganó a Gimnasia por 3 a 0, en un amistoso en Mar del Plata, y el delantero Mauricio Piersimone lo llevó en andas. Fue la última gran alegría de Prátola. “...uno se pregunta, ¿existe Dios? A mí me pusieron una piedra en el camino y me dijeron: arreglátela”, le había confesado a La Nacion. Y se las arregló con coraje Edgardo Prátola, un luchador de la vida.

"Mi sueño es que me vuelvan a putear en una cancha los hinchas de Gimnasia"

Destruído

Una angustia enorme, puede ser precipitado pero la amenaza de los promedios sigue creciendo. Un equipo que cada vez se supera en su mediocridad. Jugadores que vuelven a dar muestras de que apenas están en condiciones de jugar en la B Nacional. Un plantel con el ánimo por el piso, con una preparación física desastrosa, y algunos jugadores que encima, cobran lo que cobran.
Mal primer paso del nuevo DT, flojo en un planteo que expuso demasiado al flojísimo Núñez y, sobre todo, al cada día más penoso Gastón Fernández. Después fue más de lo mismo, una defensa floja en la marca y en el rechazo y sufriendo incluso más que antes en la pelota parada; y un mediocampo que le complica aún más el panorama a la defensa ya que no para a nadie. El único en esta línea para destacar fue otra vez Gil Romero, de mucha entrega. Gelabert es el símbolo, posiblemente junto a Angeleri, de lo mal que se están haciendo las cosas en el club, primando amiguismos. Y Román Martínez.. Arriba, sólo el Negro, que da pena verlo jugar en un equipo tan mediocre, y que pese a jugar sólo contra todos los rivales, lleva peligro.

Muy alarmante la situación de Estudiantes, apenas 32 puntos en la temporada, 82 en el acumulado para el año que viene, con equipos como Godoy Cruz que nos siguen descontando puntos. Es urgente sacar puntos en estas 9 fechas, arrancar en el fondo significaría jugar con una presión que alienta los malos resultados. Se viene Boca, golpeado y con Corinthians y River en el horizonte, sólo sirve ganar.

Si bien no masivamente, por primera vez la gente perdió la (enorme) paciencia con los jugadores. Una pena que los insultos caigan cuando en la cancha están los Rulli, Silva, Gil Romero, Auzqui. Uno supone que los destinatarios del mensaje están claros.

Cero

Más de lo mismo en Estudiantes; no fue superado por su rival pero estuvo lejos, lejísimo de mostrar un buen nivel. Por escasos momentos pudo manejar bien la pelota, pero durante la mayoría del partido estuvo plagado de imprecisiones y falta de ideas. Similar a otros partidos del campeonato, esta vez por lo menos se pudo rescatar un empate (que no suma para nada). Pellegrino tendrá muchísimo trabajo, deberá centrarse en la urgente necesidad de sacar puntos, para poder comenzar un proyecto para el próximo torneo.

En cuanto a los rendimientos individuales hubo figuras repetidas: otra vez el Negro el punto más alto, sólo contra toda la defensa obligó y llevó peligro, quizás en alguna jugada debería haberla cedido a un compañero. Lo de la Gata fue incluso más bajo que el patético rendimiento de los últimos partidos, y la otra figura fue Gil Romero.

Caída libre

Último. Así está Estudiantes. Mucho tiene que ver Cagna y su ineptitud (y alergia al trabajo), pero los grandes responsables son los jugadores y quienes armaron este plantel y el de los últimos cinco torneos. Es un momento muy duro, juega mal y pierde, juega más o menos sin ser peor que su rival, y pierde también. Hace un gran sacrificio, sin ideas, y con errores individuales lo pierde. Tiene todo para liquidarlo y quien hoy se cagó en todos (jugadores e hinchas) sobra la situación, y te lo empatan. Como mucho hace un buen partido y supera a un gran equipo, y rescata un punto.
Lo máximo a lo que parece aspirar hoy Estudiantes es a ser igual de malo que su rival.
Hoy por méritos propios o falencias de Arsenal le llegaron muy poco. Pero fue un equipo sin juego, sin precisión y con nula presión al rival. Con 10 por otra estupidez de Jara (que tiene bastantes partidos en el lomo como para hacerlas y un antecedente similar) se la bancó medianamente bien, aunque parecía que el carril derecho de Angeleri estaba demasiado expuesto, pese a eso Zuccarelli no hizo ningún cambio hasta que lo obligaron las lesiones de Desábato y Braña.
Para destacar el buen debut de Rulli, un muy buen partido de Ré y la entrega del Negro, cada día más solo. Lo de Jara es para colgarlo por un buen tiempo, Gil Romero se mostró muy impreciso y la Gata con puro toquecito intrascendente (muchos irritantes pases hacia atrás). Angeleri no había tenido un mal partido, pero falló y muy feo en el gol; al igual que Silva que se equivocó en la salida.

Poco para apuntar, Estudiantes no para de caer, y todos sabemos donde termina la historia si no se cambia. Lo más grave es el no ver señales de que quienes conducen el club sean conscientes de esta situación. Hoy en Estudiantes fallan las "famosas" cuatro patas: dirigentes ineptos que viven en una nube de pedo más las peligrosas ideas europeas, técnicos malos o que no le encuentran la vuelta a los jugadores e hinchas que aplauden "viejas" épocas y que da la impresión que si alguna vez dan muestra masiva de repudio será cuando la situación sea inminente. Por último los jugadores, sin caerle a los pibes, en particular unos pocos que casualmente son los que más cobran y se llenan la boca de amor al club u otros que han recalado por simple amiguismo ya que su nivel es paupérrimo.

Pellegrino, nuevo DT

En medio de la tragedia, se confirmó a Pellegrino como nuevo DT de Estudiantes hasta diciembre de 2014. Dirigirá su primer partido ante Quilmes, por lo que el interinato durará sólo dos partidos.
Pese a no compartir la elección de la CD (o de Verón), realmente había candidatos (reales o periodísticos) que preocupaban más. Es una apuesta, una de las tantas que ha hecho el club en materia de técnicos en estos años, aunque pese a ser un novato cuya primer experiencia no fue buena, tendrá un sueldo importante.

Pese a no ser de la escuela a la cual pertenecemos, lo único que pedimos es seriedad, humildad y mucho trabajo, con eso seguramente superará la mediocridad del DT anterior. Estamos a tiempo, pero de fallar en estos meses la situación puede tornarse muy grave. Ojalá Pellegrino pueda armar un buen equipo en base al trabajo y no se deje manipular. Le deseamos lo mejor, que será lo mejor para Estudiantes.

Fin del ciclo Cagna. ¿Cambiará algo en Estudiantes?

Terminó la agonía del ciclo de Diego Cagna y finalmente dejó de ser el técnico de Estudiantes.

Fue tras otra dura derrota de local, faltando pocos minutos, en la que Estudiantes mostró más de lo mismo. Sin ser menos que su rival, aún superándolo por momentos, no mostró peso en ataque y evidenció las mismas falencias en defensa que siempre. Hoy por enésima vez se pierde por un gol de pelota parada. Analizar el rendimiento colectivo tiene poco sentido ya que sería repetitivo, en cuanto a lo individual quien se destacó fue Gil Romero, de gran partido, que nos dejó preguntándonos por qué tiene tan pocos partidos en Primera. J. Silva mostró que en ataque es más que Iberbia y llevó peligro con un par de centros, mientras que en defensa tuvo un partido flojo. Jara volvió a la apatía de siempre, de la mano de un excesivamente displicente (por no usar una palabra más dura) Román Martínez. El Pampa pese a sus numerosos defectos tuvo sacrificio, y el Negro no tuvo su mejor partido -al igual que Auzqui- pero obligó. Llama la atención el bajísimo nivel de alguien tan regular como Ré.

¿Qué hizo Desábato en el gol?

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Empezará la ola de candidatos, cubierta del humo periodístico. Habrá que esperar los pasos a seguir de esta CD, que todos esperamos que se maneje más prolijamente que en las dos sucesiones anteriores, cuando puso al mánager de interino y lo mantuvo para echarlo apenas empezaron los malos resultados, y cuando tardó más de dos meses en la elección del DT, y lo hizo de manera muy desprolija. Esta vez recaerá la decisión en el Director Deportivo, por eso los primeros nombres que aparecen son de personas cercanas a él (y para nada cercanas a Estudiantes).

Un interinato prolongado sería jugar con fuego. Hoy Estudiantes tiene 81 puntos en la tabla de promedios. Lo mínimo indispensable para no arrancar muy complicados es llegar a 100.

Lo único que pide el hincha es seriedad y trabajo. Y que no se le paguen fortunas a jugadores que se comieron 4 técnicos en 2 años y que nos acostumbraron a a la derrota. Mientras siguen declarando, cagándose de risa en la cara de todos los hinchas, "jugamos bien".