domingo, 8 de diciembre de 2013

Peor imposible

El partido de Estudiantes fue una vergüenza, realmente no hay otra palabra que lo describa mejor. Imposible imaginar un final de año peor a este. Con la chance de redondear una buena campaña, la mejor desde la salida de Sabella, se termina por dejar una imagen muy floja.
Estudiantes sacó solo 27 puntos en el peor torneo corto de la historia. Y si sacó 27 puntos, viendo su rendimiento (sobre todo de local) es porque hubo equipos demasiado malos. Tenemos 27 puntos por Colón, por Quilmes, por Racing, por All Boys. Todas victorias de local sin dejar una buena imagen (salvo el PT con All Boys) y es más, haciendo pésimos partidos como con Racing o Colón.
Nos conformábamos con el "no somos menos que nadie". Eso, que es cierto, no es una virtud. Fue un torneo extremadamente mediocre, eso no puede justificar las falencias propias.

El objetivo de 28 puntos no se cumplió. Y tampoco se cumplió lo buscado por el DT. Si desde esquema y discurso buscaba un equipo ofensivo, jamás se vio. Porque los mejores partidos de Estudiantes fueron cuando fue de punto frente a un rival fuerte, a esperarlo, presionarlo y salirle de contra (Lanús, Newell's, San Lorenzo). En cambio, ante rivales muy débiles hubo partidos lamentables (Rafaela, Argentinos, Godoy Cruz, Tigre hoy, todos partidos de 6 puntos). A esto se le puede sumar el clásico, muy cerca de lo que pudo haber sido una derrota histórica, dando una imagen muy triste frente a un rival que metía y mordía.

Lo de hoy, fue más de lo mismo. Pero peor. El nivel de imprecisión fue alarmante. Finalmente, te meten un gol por la estúpida obsesión del DT por salir jugando. Después nada de nada, apenas un par de tiros al arco, apenas. Apatía generalizada, rendimientos bajísimos incluso de jugadores como Gil Romero que casi siempre cumple.

Para colmo, una triste imagen de Verón en lo que pudo haber sido su último partido. Más allá de su floja actuación (como la de todos) haciéndose expulsar vaya uno a saber por qué. Pura impotencia, echándole la culpa al árbitro por la patética imagen de su equipo.
Eso sí, Verón demuestra que jugar así le molesta. Lo mostró con Colón pese a la victoria, hoy por calentón lo mostró en la cancha. En cambio, parece que otros (incluso algunos pibes) hoy salieron a la cancha pensando en las vacaciones.

Mientras la gente parece excesivamente generosa con los aplausos, finalizando el tercer año mediocre seguido.

Deberá trabajar mucho el DT, tener autocrítica (para ser suaves, por lo de hoy debería pedirle perdón a la gente) y darse cuenta que el camino a seguir es el de Rosario, el de Lanús, el del Nuevo Gasómetro. No estos partidos de local pese a un invicto hasta hoy solo logrado por haber enfrentado a rivales de muy bajo nivel.

domingo, 1 de diciembre de 2013

La especialidad de la casa

Bidón, inteligencia, sacrificio. Estudiantes jugó como manda su historia.

Es un equipo extremadamente irregular, pero que antes los rivales difíciles siempre estuvo a la altura. Hoy no arrancó muy bien (como todos los partidos de visitantes) pero se fue acomodando, poniendo nervioso a San Lorenzo y empezó a manejar un poco más el partido. El segundo tiempo fue excelente, a esperar atrás y salir bien rápido, algo que no había salido bien en el primer tiempo salvo en la jugada del final que pegó en el travesaño. Después se sufrió, y cuando se falló en defensa respondió bien Rulli.


El periodismo nos ninguneó, los jugadores cuervos nos ningunearon, los hinchas festejaban antes de tiempo. Para ser campeón, hay que tener huevos, aunque en este torneo de locos nadie parece tenerlos. Hoy la hinchada del Cuervo cuando más tenía que empujar, en silencio.
Salvo para cantar "equipo chico la puta que te parió" cuando Rulli hacía tiempo, mientras todos nosotros sonreíamos. Chicos, con orgullo, pero con cuatro Copas que en tu puta vida vas a ganar.

A ganarle a Tigre y llegar a los tan ansiados 30 puntos.


- Rulli, hacer tiempo es de equipo chico, de equipo grande, de equipo vivo?
- Es Estudiantes... Estudiantes es una escuela.